¿Instrucciones desde el extranjero?: las críticas de la DT al modelo laboral de Telefónica

El 2021 fue un año de cambios y adaptaciones al interior de Telefónica Chile. En marzo, en plena pandemia, la firma comenzó a implementar un nuevo esquema laboral denominado Hispam, el cual buscaba crear “sinergias” entre las operaciones latinoamericanas de unos 11 países, entre ellos Chile, Colombia, Perú, Ecuador, Argentina, México y Venezuela.

El modelo implicaba la prestación de ciertos servicios desde Telefónica Chile hacia otras compañías de la región donde tuviera participación societaria y, a la inversa, recibir servicios de las mismas.

En palabras de la propia compañía, se trataba de aportar en áreas que tenía un alto conocimiento y especialización y, a cambio, contar con servicios de otras empresas en aquellas dimensiones donde no tiene ventaja competitiva.

Si bien el nuevo formato partió sin mayores inconvenientes, surgió la preocupación entre la plantillla y durante el segundo semestre de 2021 un sindicato solicitó a la Dirección del Trabajo (DT) un pronunciamiento sobre la validez de este modelo. Su visión es que “generaría incertidumbre en los trabajadores respecto a instrucciones enviadas por las jefaturas que se encuentran en el extranjero y que no mantendrían un vínculo laboral vigente con Telefónica”.

Según relataron los trabajadores a la DT, el modelo implicaba que los equipos tuvieran dos jefaturas directas: una administrativa, ubicada en el país; y otra funcional, domiciliada fuera del territorio nacional.

Preocupación sindical

Tras más de un año y medio de espera, en marzo pasado la DT entregó su postura en torno al tema, criticando duramente el esquema.

Para dar una respuesta adecuada, la DT solicitó un informe de fiscalización practicado por un funcionario de la Inspección Provincial del Trabajo de Providencia, y en la respuesta al sindicato relata que en dicha fiscalización se habría constatado que la implementación del nuevo modelo Hispam “afectó directamente a los trabajadores dependientes”, generándoles incertidumbre y angustia.

A juicio de la DT, la fiscalización evidenció que la instalación del modelo de trabajo Hispam “conllevó inconvenientes que afectaron a los trabajadores en Chile, tanto por la disminución significativa de sus funciones, la falta de determinación de las jefaturas, dificultades de trato y problemas con los horarios de trabajo por las diferencias horarias entre las distintas empresas a nivel hispanoamericano, sin respeto a los måximos de las jornadas laborales ni los tiempos de desconexión establecidos en la legislación laboral vigente”, dice el texto.

Para el servicio la modalidad implementada, además de transgredir el cumplimiento de la normativa laboral vigente y el principio de bilateralidad, “transgrede el principio de certeza”, ya que en las relaciones laborales las modificaciones emanadas de la potestad de mando deben manifestarse, de tal manera, que generen confianza y no factores de incertidumbre que perjudiquen las relaciones laborales y la operatividad del contrato de trabajo.

“La falta de claridad de quién es la persona que dirige o quién en concreto detenta el mando y administración, la dispersión de esta facultad en diversos sujetos o la delegación de todo o parte de estos atributos en terceros desconocidos de la relación contractual es contraria a derecho”, acotó la DT.

Los cambios

Contactada por el pronunciamiento, desde Telefónica Chile señalaron que el documento que emitió la Dirección del Trabajo, se basa en una consulta formulada en el año 2021 “antes de la aplicación de las adecuaciones y ajustes incorporados por parte de la compañía, por lo que no recoge el modelo que finalmente se implementó, el que cumple íntegramente con las normas laborales chilenas”.

De hecho, añadieron que han ido sumando diversas prácticas laborales, “que permiten asegurar el bienestar de sus trabajadores”.

Así, por ejemplo, plantean que han desarrollado plataformas, como Office 365 y Workplace, que permiten el desarrollo del teletrabajo y de la desconexión digital, trabajando conjuntamente con sus sindicatos, con quienes mantienen “un diálogo fluido, efectivo y de gran confianza”.

“Gracias a nuestras prácticas, hemos sido reconocidos con diversos premios (Impulsa Talento Femenino, Padres y Madres que Trabajan, entre otros), siendo la primera operadora de telecomunicaciones del país en certificarse bajo la Norma 3262 con el Sello Iguala Conciliación del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, lo que refuerza nuestro permanente compromiso con la diversidad, equidad de género y conciliación de la vida personal, laboral y familiar de todos nuestros colaboradores”, declararon.